Los Golpes de la Vida y la Bondad de Dios – Salmo 119:65-72

Esta sección que se titula “tet” corresponde a la letra “t” en nuestro idioma. El énfasis del salmista es mostrar cuán bueno es Dios, cuán buena es su Palabra (la cual se menciona en toda la sección) y cómo nos ayuda en los golpes de la vida. Es su Palabra la que nos muestra lo que Dios quiere hacer en nuestra vida. Es su Palabra la que nos enseña como hacer frente a los golpes de la vida.

La palabra “bueno” en hebreo es “tob” y aparece cinco veces en esta sección. “Bueno” o “bien” has hecho. El versículo 66 comienza en hebreo, “buen sentido..” El v. 68, “bueno eres ú..” y termina diciendo en el versículo 71, “bueno me es haber…” y “buena me es la ley”.

La pregunta que surge del ejemplo de la película y estudiando este texto es:

¿Qué debemos recordar o hacer cuando la vida nos golpea, cuando vienen luchas, pruebas, aflicciones, persecución o sufrimiento?

Lee el sermón completo en tres partes aquí:

 Facebook        Twitter        Instagram        Sitio Web   Youtube
Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> aflicciones, Dios es bueno, golpes de la vida, la bondad de Dios, La Palabra de Dios, la soberanía de Dios, pruebas, Salmo 119:65-72, sufrimiento | Leave a comment

Mi Suficiencia – Salmo 119:57-63 – Tercera Parte

Hemos visto las cuatro maneras de vivir una vida teniendo al Señor como suficiente para nuestra vida. Pero además de esto debemos darnos cuenta de que el amor de Dios nos persigue cuando el es todo para nosotros. Y nosotros debemos responder a este amor en cuatro maneras.


Dios es Suficiente y  Respondo a Su Amor que Me Persigue vv. 61-64

Estos cuatro versículos están conectados con el versículo 64 que dice, “”De tu misericordia, oh Jehová, está llena la tierra”. La misericordia (“jesed”) es el amor persistente de Dios del que hemos hablado antes. Este amor es evidente, aunque hay muchos que no lo ven o lo rehúsan. El cristiano no puede negarlo. El amor de Dios es evidente y probado con la muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Fue la prueba más grande de su amor. Debemos recibir este amor, reconocer y responder a El.

¿Cómo responder a este gran amor que Dios tiene por nosotros?

Su amor me persigue siempre. Es incambiable. Me ayuda a entender que nada puedo hacer para ganarme su favor. Esta parte nos muestra la intencionalidad de toma para ser que Dios sea mi suficiencia.

Hay cuatro maneras que debemos responder con nuestra mente que nos ayudaran a profundizar nuestra suficiencia en el Señor.

1. Mente que Recuerda v. 61
Recuerdo su Instrucción cuando la maldad me Asedia 

“Compañías de impíos me han rodeado,
Mas no me he olvidado de tu ley.”

El salmista dice que la maldad que viene de personas “impías” o malas le ha rodeado. La idea es que le quieren atrapar como un ave que se atrapa con una red.  En esa situación es fácil darse por vencido. Es fácil decir que Dios se ha olvidado de nosotros ya que nos ha dejado ser rodeados por gente mala.

Sabemos que nuestro enemigo, Satanás anda como león rugiente viendo a quien devorar. El usa también a personas. Recordemos que usó a Judas Iscariote para traicionar al Señor Jesús. Si lo hizo con nuestro Señor lo hará con nosotros. El quiere desanimarnos. El quiere que creamos que Dios nos ha desamparado, que no nos ama y que no merece que sea nuestra suficiencia.

El salmista viéndose en esta situación, no desconfía en el amor persistente, inalterable de Dios. El recuerda, no se olvida de la ley, la verdad de Dios. Su mente recuerda lo que la Palabra de Dios dice acerca del gran amor de Dios para con sus hijos. 
Esto es lo que nosotros debemos hacer en esos momentos, recordad la instrucción, la enseñanza del Señor.
Esta semana he recibido ciertos ataques en otra forma y ha sido difícil mantenerme en esta verdad. Me he esforzado en recordad lo que el Señor me dice en su Palabra. Debo tener fe, tener fe que el plan de Dios para mi vida se cumplirá.

Responde al amor de Dios recordando lo que Él te ha dicho. Tu suficiencia en Él crecerá mientras más lo hagas.

2. Mente Disciplinada v. 62
Me Dedico a Buscarlo y Alabarlo Con Esfuerzo 

“A medianoche me levanto para alabarte
Por tus justos juicios.”

No solo responde al amor de Dios recordando con su mente la instrucción del Señor, sino que también tiene una mente disciplinada para buscarle y alabarle por sus “justos juicios”.  Esto es algo planeado y deliberado. Algo muy extraño para mi. Cuando no puede dormir no me acuerdo mucho de los juicios de Dios. Generalmente es porque hay algo que tengo que solucionar o es algo que me está molestando. Pienso en el problema y trato de solucionarlo. Las últimas tres o cuatro semanas han sido mi salud. Esta semana fue otra cosa. Pero el Señor me habló a través y he tenido que esforzarme a no pensar en las situaciones que estoy pasando sino para alabarle por lo justo que son sus juicios.

Pensaba que el mundo no es justo. No importa que pensemos de este país, no es perfecto. Hay mucha injusticia. Es mejor que muchos pero no son justas. Pero los juicios del Señor son justos. Debemos de disciplinarnos a buscarlo y alabarlo con esfuerzo por sus justos juicios. 
Tener al Señor como nuestra suficiencia no es algo pasivo, sino activo, requiere una mente disciplinada. Es algo que nos cuesta a muchos de nosotros. Aun en esta mañana, ¿cuántos ya están desenfocados en este momento escuchando? 

Responde al amor de Dios disciplinando tu mente a buscarlo para adorarle. Esto te ayudará a hacerle suficiente en tu vida.

3. Mente que Cultiva v. 63
Cultivo Relaciones que me Ayudan a serle Fiel 

“Compañero soy yo de todos los que te temen
Y guardan tus mandamientos.”

Algo más que nos ayuda a responder al amor de Dios y así mantenerlo como mi suficiencia es cultivar nuestra mente con otros que temen al Señor y son obedientes. Notemos que dice que es compañero de los que le temen “y guardan” los mandamientos del Señor. Las compañías que nos ayudaran a tener al Señor como nuestra suficiencia, nos ayudaran a recordar el amor de Dios son los que viven en obediencia al Señor.  Si tus mejores amigos o amigas son aquellos que no temen al Señor o no obedecen a El, no te ayudará en tu relación con el Señor.

Estos son importantes para cultivar nuestra mente y nos ayudan a serle fiel a nuestro Dios suficiente. Este es el diseño de Dios. Su pueblo se anima, se fortalece, se ayuda a crecer mutuamente para ser personas que le temen, guardan sus mandamientos y responden al amor inalterable de Dios.

Responde al amor de Dios cultivando tu mente a través de amistades que tienen el mismo deseo de tener al Señor como suficiente.

4. Mente que Aprende
Busco más de la Enseñanza del Señor

“De tu misericordia, oh Jehová, está llena la tierra;
Enséñame tus estatutos.”

No solo tenemos una mente que recuerda, que es disciplinada, que se cultiva con la ayuda de otros, sino que sigue aprendiendo la enseñanza del Señor. Cuando el salmista dice, “enséñame tus estatutos” no es algo pasivo, es algo que requiere que le busquemos en su Palabra.

Esta semana leía en Esdras 7:10 “Porque Esdras había preparado su corazón para inquirir la ley de Jehová y para cumplirla, y para enseñar en Israel sus estatutos y decretos.”

Esdras estaba comprometido a una mente que aprende. Hay tres pasos que hacía en este proceso: 1. Estudiaba la ley, 2. La ponía en práctica y 3. la enseñaba a otros.  Este es el orden. Todos son difíciles y requieren disciplina. Para algunos de nosotros es fácil estudiarla y enseñarla, pero no aplicarla. Este es un paso muy importante para los que enseñamos o predicamos.

Responde al amor de Dios buscando con tu mente la enseñanza de Dios. Así podrás hacerle más tu suficiencia.

“Oh Señor, tu eres mi porción, mi herencia, mi suficiencia, mi todo.  Muéstrame cómo tomar lo que soy en Cristo, quién quiero ser para ti, y lo que puedo hacer para tu gloria, y pueda cumplir tu propósito en mi.”

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo mi todo, Dios es suficiente, el señor es todo, mi porción es Jehová, mi suficiencia, salmo 119:57-63 | Leave a comment

Mi Suficiencia – Salmo 119:57-63

Vivimos en un mundo donde se nos adoctrina desde que nacemos que nada es suficiente. Somos una cultura materialista. Queremos más y nunca es suficiente con lo que tenemos. No es suficiente tener una esposa y serle fiel toda la vida, eso no es realista en nuestra cultura. No es suficiente para hacerme feliz. Nuestros niños aprenden desde pequeños que no es suficiente con unos pocos juguetes. Ellos quieren lo más moderno. Para las mujeres no hay suficiente ropa, maquillaje, o moda, siempre hay algo más que quieren. Para los hombres, no es suficiente un buen trabajo, ganar lo suficiente, siempre quieren más dinero, una mejor posición, más reconocimiento. Una religión no es suficiente, muchos buscan el sincretismo de religiones. Lo mejor de todas. Nada es suficiente. Esto incluye a cristianos y no cristianos. A veces no se ve la diferencia.

Esta sección “jet” que corresponde a la letra “h” o “ch” en nuestro idioma habla directamente a nuestra cultura, a nuestra vida diaria, a nosotros los cristianos que decimos tener la respuesta de como vivir. Este pasaje habla de como Dios es nuestra porción, nuestra suficiencia. Explica como el creyente puede tener una relación profunda con el Señor que es suficiente para TODA su vida en un mundo que nos dice, “necesitas más que eso”. Nos muestra también como debemos responder al amor constante e inalterable de Dios que cada día nos muestra.

El salmista comienza diciendo, “Mi porción es Jehová” algo que todo judío entendía. Los Levitas eran de la tribu sacerdotal en el pueblo de Israel. Cuando Dios les dio o “heredó” su parte o su porción de la tierra Prometida a cada una de las tribus de Israel, ellos fueron excluidos.  Ellos no recibieron una porción de la tierra. El rol de ellos era el de servir al Señor y depender de las ofrendas que el pueblo daba a Dios, parte de ella era la manera de su sostén.  Pero en realidad, su herencia no era algo material, sino que era el Señor mismo del cual tenían que depender.  El era suficiente para todas sus necesidades. Números 18:20; Josué 13:14; 18:4. (Numbers 18:20; Joshua 13:14; 18:4)

 Facebook        Twitter        Instagram        Sitio Web   Youtube

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo es suficiente, Cristo mi todo, Dios es suficiente, mi porción es Jehová, mi suficiencia, salmo 119:57-63 | Leave a comment

Mi Suficiencia – Salmo 119:57-63 – Segunda Parte

En la entrada anterior introduje lo quién es nuestra suficiencia según el Antiguo y Nuevo Testamento. En el texto del Salmo 119:57-63 nos enseña como lograr esto.  Esta sección se divide en dos partes, primero, cómo podemos mantener a Dios como el único suficiente en nuestra vida. Segundo, como responder al amor inalterable que el nos da como nuestro Dios suficiente. Miraremos la primera parte en esta entrada.

Dios es Suficiente para Mi Ante Todas las Cosas vv. 57-60

Dios es suficiente para nuestras vidas ante todas las cosas. Pero esto no es algo pasivo, es algo activo. Esta parte nos muestra la intensidad de que el Señor sea nuestra suficiencia. Pablo fue intencional en su vida en Cristo (1 Corintios 9:26). Su vida era una vida disciplinada en su vivir en Cristo.
Si Dios es suficiente para nosotros, debe llevarnos a ejercer lo que el salmista nos dice en estos cuatro versículos.

¿Cómo llevo a cabo esto según el salmista?

1. Compromiso a Ser Obediente en Su Palabra v. 57b
“Mi porción es Jehová;
He dicho que guardaré tus palabras.”

Con la decisión o determinación de que Dios es mi suficiencia me lleva a una actitud de total dependencia en Él. Esperamos que Él nos guíe, nos enseñe y estamos dispuestos a seguir lo que nos mande a través de su Palabra. Si Dios es suficiente para ti, no titubearás en tu determinación de hacer lo que te manda. No hay inseguridad.

Es cuando Él no es suficiente para nosotros que buscamos algo más. Cuando queremos algo que no es lo que Dios quiere cuando titubeamos en hacer lo que nos manda.
Los jóvenes buscan un/una compañero porque no se sienten completos. Cuando un vicio toma control de tu vida, es porque el Señor no es suficiente para ti. Cuando el temor, la ansiedad, la preocupación te domina, el Señor no es suficiente para ti. Cuando buscas tener más y más lo material, cuando tus hijos toman el centro de tu vida, el Señor no es suficiente para ti. Cuando quieres hacer y hacer más cosas para agradar a Dios y ganarte su favor, el Señor no es suficiente para ti. Cuando trabajas y trabajas y trabajas y no tienes tiempo sino para trabajo, el Señor no es suficiente para ti.

El salmista dijo, “mi suficiencia es Jehová…”. El debe ser todo para nosotros. El salmo 73:25 lo expresa así: “¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti?
Y fuera de ti nada deseo en la tierra.”
¡Que esta sea nuestra oración diaria!

Una segunda manera de tener a Dios como el único suficiente es

2. Buscando su Gracia en Oración v. 58
“Tu presencia supliqué de todo corazón;
Ten misericordia de mí según tu palabra.”

El salmista dice que suplica en oración el favor de Dios. Esa es la idea de la palabra “presencia” (mirar Salmo 45:12). La gracia de Dios es suficiente para mantenernos fiel a el.

En 2 Corintios 12:9 es lo que Pablo recibió cuando pedía ayuda en su necesidad. Cuando tenemos necesidades, apuros, luchas es cuando rogamos a Dios buscando que nos responda. En muchas ocasiones no nos dará lo que pedimos, en otras nos hará esperar, pero siempre nos dará su gracia que nos sostendrá. Pidamos “de todo corazón” y pidamos que sea según su misericordia o fidelidad según su Palabra. El está atento a nuestras plegarias y súplicas.

“Porque los ojos del Señor están sobre los justos,
Y sus oídos atentos a sus oraciones;
Pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal.” – 1 Pedro 3:12

El salmista no dice “ten misericordia de mí según tu palabra” con duda, lo dice con confianza. Sabe que Dios se dará a sí mismo cuando Él es lo que anhelamos. Dios está buscando esta clase de personas para mostrar su poder y su fidelidad de acuerdo a su Palabra.
2 Crónicas 16:9 dice, “Porque los ojos del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón es completamente suyo.” (Versión BDLA)

Yo quiero ser esta persona.
¿Eres tu esa persona? ¿Quieres ser tu esta persona?

La tercera manera de mantener a Dios como nuestra suficiencia es

3. Auto Examinando Nuestros Caminos v. 59
“Consideré mis caminos,
Y volví mis pies a tus testimonios.”

Sócrates, el gran filósofo griego dijo, “La vida sin examinarse (o auto examen) no vale la pena vivirla”. Tenía razón.  Una vida que tiene al Señor como suficiente en todo es una vida que se auto examina en sus caminos. Es una persona que reflexiona, piensa en su manera de vivir y actuar asegurándose que vive de acuerdo a los testimonios del Señor. Si se da cuenta que esta caminando opuesto a la verdad de Dios debe arrepentirse. Esa es la idea de “considerar” en este versículo. La versión del Oso dice “y torné mis pies a tus testimonios”.
El creyente se da cuenta que va mal y corrige su camino.

Pablo lo dijo de diferente manera, quizás más fuerte de lo que dice el salmista.
“Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?” (2 Corintios 13:5)

Esta mandando a los de Corinto a que se auto analicen si son verdaderamente cristiano, si están viviendo lo que dicen creer. Hoy día hacemos lo opuesto. Asumimos que todos los que dicen ser cristianos lo son. Asumimos que si van a la iglesia son creyentes verdaderos.

El verdadero cristiano se auto analiza y si esta fuera del camino, se arrepiente y corrige su destino que sea de acuerdo a los testimonios del Señor.
¿Te auto examinas tu en tu relación con el Señor?

Y finalmente hacemos Dios nuestra suficiencia,

4. Obedeciendo Urgentemente v. 60
“Me apresuré y no me retardé
En guardar tus mandamientos.”

La urgencia de ser obedientes es lo que muestra este versículo. Es tan opuesto a lo que vemos hoy día. Somos lentos para la obediencia. Hay muchos que dicen,
 “NO me apresuré y me retrasé en guardar tus mandamientos”.
Hay personas que duran años para hacer lo que Dios dice. Y cuando se les pregunta porqué no obedecen, dicen que “están en proceso”.

¿Qué pasa cuando no obedecemos urgentemente? Primero, retrasamos nuestro crecimiento espiritual. 1 Cor. 3:1-3 Esto quiere decir que algo toma el lugar del Señor. Su verdad no es suficiente.

Segundo, El autor de Hebreos 4 dice que el pueblo de Dios no entró en la tierra prometida por su desobediencia. Lo aplica a los creyentes diciendo, “Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones…Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia.” vv. 7, 11

El corazón nuestro se endurece por no obedecer. Además, no gozamos de la preparación del reposo que nos espera. Nos espera un reposo glorioso, pero requiere que seamos prontos a obedecer. Esto es parte de la preparación y de la bendición que Dios nos da cuando somos obedientes. Solo así podemos tener a Dios como nuestras suficiencia.

¿Obedeces urgentemente?

Estas son las cuatro maneras de vivir una vida teniendo al Señor como suficiente para nuestra vida. En la siguiente entrada hablaremos sobre como amor de Dios nos persigue y como nosotros debemos responder a este amor en cuatro maneras.

Tercera parte

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> La Palabra, La Palabra de Dios, la suficiencia de Cristo, la suficiencia de Dios, mi suficiencia, salmo 119:57-63, salmos 119 | Leave a comment

Mi Suficiencia – Salmo 119:57-63 – Primera Parte

Vivimos en un mundo donde se nos adoctrina desde que nacemos que nada es suficiente. Somos una cultura materialista. Queremos más y nunca es suficiente con lo que tenemos. No es suficiente tener una esposa y serle fiel toda la vida, eso no es realista en nuestra cultura. No es suficiente para hacerme feliz. Nuestros niños aprenden desde pequeños que no es suficiente con unos pocos juguetes. Ellos quieren lo más moderno. Para las mujeres no hay suficiente ropa, maquillaje, o moda, siempre hay algo más que quieren. Para los hombres, no es suficiente un buen trabajo, ganar lo suficiente, siempre quieren más dinero, una mejor posición, más reconocimiento. Una religión no es suficiente, muchos buscan el sincretismo de religiones. Lo mejor de todas. Nada es suficiente. Esto incluye a cristianos y no cristianos. A veces no se ve la diferencia.
Esta sección “jet” que corresponde a la letra “h” o “ch” en nuestro idioma habla directamente a nuestra cultura, a nuestra vida diaria, a nosotros los cristianos que decimos tener la respuesta de como vivir. Este pasaje habla de como Dios es nuestra porción, nuestra suficiencia. Explica como el creyente puede tener una relación profunda con el Señor que es suficiente para TODA su vida en un mundo que nos dice, “necesitas más que eso”. Nos muestra también como debemos responder al amor constante e inalterable de Dios que cada día nos muestra.

El salmista comienza diciendo, “Mi porción es Jehová” algo que todo judío entendía. Los Levitas eran de la tribu sacerdotal en el pueblo de Israel. Cuando Dios les dio o “heredó” su parte o su porción de la tierra Prometida a cada una de las tribus de Israel, ellos fueron excluidos.  Ellos no recibieron una porción de la tierra. El rol de ellos era el de servir al Señor y depender de las ofrendas que el pueblo daba a Dios, parte de ella era la manera de su sostén.  Pero en realidad, su herencia no era algo material, sino que era el Señor mismo del cual tenían que depender.  El era suficiente para todas sus necesidades. Números 18:20; Josué 13:14; 18:4.
Este concepto aparece en otras partes en el Antiguo Testamento como Lamentaciones 3:24 y el Salmo 16:5; 73:26; 142:5 Es muy interesante notar que el contexto de Lamentaciones es el juicio de Dios sobre el pueblo de Dios debido a su desobediencia. En ese contexto es que la misericordia de Dios no les consume, sino que se renueva cada día y la única porción o suficiencia es Él.
Hemos hablado varias veces de como el Antiguo Testamento habla de figuras o simbolismos que se hacen realidad en el Antiguo Testamento. De igual manera, es este tema. La Biblia dice que todos los que hemos creído en Cristo somos su “real sacerdocio”. 1 Pedro 2:9 dice, “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable”
Siendo sacerdotes nos lleva a preguntar “¿Quién es mi porción? o mi suficiencia?” Si, en al Antiguo Testamento es Dios. Pero  también lo encontramos claramente en el Nuevo Testamento. Cristo es nuestras porción. Para Pablo el vivir era Cristo. El era suficiente para su vida y era el deseo que Cristo lo fuera para todos los creyentes:
“a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre” Colosenses 1:28. 
En Colosenses 2:10-11 expresa la idea que somos completos en Cristo. Expresa lo suficiente que Él es para nosotros porque el es Dios y es nuestra “porción”.
“Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad,
y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.” 
En Colosenses 3:1 dice: “Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.” Colosenses 3:11 dice también, que “Cristo es el todo, y en todos.” Nuestra suficiencia esta en Cristo.

Antes de que puedas decir “mi porción es Jehová” debes por fe recibirle, aceptarle, creer que Él lo es. El debe ser suficiente para salvarte de todos tus pecados y darte la vida eterna. El debe ser suficiente para vivir una vida que agrada a Dios. El debe ser suficiente para recibir su gracia salvadora. Si no lo es, este sermón será imposible de cumplir. ¿Le has hecho tu porción? ¿Es tu suficiencia?

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo, Cristo es suficiente, Cristo mi todo, en Cristo, mi porción es Jehová, Suficiencia | Leave a comment

Jose’s Testimony

En este testimonio José comparte testimonio que muestra como nuestro Señor resucitado cambió su  vida, dándole perdón de pecados y salvación eterna. Es inglés con subtítulos en Español
 Facebook        Twitter        Instagram        Sitio Web   Youtube
Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo salva, el Cristo resucitado, el poder de Cristo, testimonio, testimonio de salvación | Leave a comment

El Mensaje de la Resurrección

El Viernes Santo recordamos el sacrificio de Cristo en la cruz por nuestros pecados. Su muerte fue algo horrendo, pero no fuera del plan de Dios. Sabemos que el resucitó. Ese domingo, dos ángeles dijeron a las mujeres:

“y como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra, les dijeron: ¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?
No está aquí, sino que ha resucitado. Acordaos de lo que os habló, cuando aún estaba en Galilea.” Lucas 24:5-6

Este fue el plan de Dios. ¿Qué mensaje nos da la resurrección de nuestro Señor Jesucristo de entre los muertos? ¿Es simplemente un hecho histórico que conmemoramos o es algo más relevante para nuestra vida?

El mensaje de la resurrección nos enseña cuatro verdades.

1. La Resurrección Prueba que el Pago de Nuestro Pecado Ha Sido Realizado – Rom. 4:25

A. Nuestro Pecado Demandaba un Precio – Rom. 3:23

Todos hemos escuchado tanto en sermones como otros medios de que todos somos pecadores por medio de la herencia que recibimos de nuestros antepasados Adán y Eva. Esto es lo que habla Pablo en Romanos. Nos dice como el pecado entró en la humanidad y trajo consecuencias eternas que incluye la muerte física. Este pecado demanda un precio que nadie de nosotros puede pagar. Es imposible. Un pecador no puede pagar por su pecado.

Pero esto también nos enseña lo que Dios hizo al respecto al enviar a su hijo

B. Tomó Nuestro Lugar Voluntariamente Para Pagar el Precio de Nuestro Pecado

“El cual fue entregado por nuestras transgresiones” Rom. 4:25

Dios en su gran amor sabía que nosotros nunca podríamos de ninguna manera pagar por nuestros pecados. Así que hizo algo al respecto. La Biblia dice que nos amó tanto que dio a su Hijo unigénito para tomar nuestro lugar. Pero el Hijo mismo se ofreció voluntariamente como nuestro substituto. Juan 10:18

En el Antiguo Testamento había un sistema de sacrificios para recibir el perdón de los pecados. Pero este sistema, como dije antes, no era más que una sombra de lo que vendría. En el día de Expiación (Yom Kippur), el sacerdote Levita, que llevaba en su pectoral doce piedras que representaban las doce tribus de Israel, sacrificaba un cordero en el altar en los atrios del templo. Tomaba la sangre de ese cordero y entraba al lugar santísimo (que solo era una vez por año) donde rociaba la sangre sobre el arca del pacto. Lo hacia para que el y el pueblo pudieran acercarse a Dios.  Pero estos sacrificios eran inefectivos por varias razones:

1. No les perdonaba sus pecados
2. No les daba acceso a Dios
3. Eran actos externos.

La Escritura dice que (Heb. 9:11-12; 24-26) es que Jesucristo no solo es el Sumo Sacerdote, perfecto, sino que es también el sacrificio, el cordero perfecto de Dios, que se ofreció por nosotros. Se ofreció para pagar la deuda de nuestros pecados. Al hacerlo, se presentó en el Lugar Santísimo Celestial como prueba de que había llevado el pago por nuestros pecados. Su resurrección es prueba de esto sucedió.

En este tiempo de semana santa, escuchamos casi siempre de las actividades extremas que hacen algunos para ganarse el favor de Dios.

En las islas Filipinas “cristianos devotos” marcharon en las calles  ensangrentados, golpeándose con látigos con navajas de afeitar. Ellos creen que este acto de “adoración” les limpia de sus pecados, les cura de sus enfermedades y les concede sus deseos. Algunos se crucificaron para pagar por sus pecados.

La Biblia es clara, nadie de nosotros puede pagar por sus pecados. Nuestras obras son sucias delante de Dios porque están contaminadas con el pecado. Cristo fue entregado a muerte por nuestros pecados y no hay más sacrificio. El no quiere actuaciones de como murió, El quiere que actúes , creas en Él, le des tu vida y le sigas.

C. Su Sacrificio nos Da Perdón de Todos Nuestros Pecados

Su muerte y resurrección nos asegura que todos nuestros pecados han sido perdonados por la fe en Él y que ya no han necesidad de ningún sacrificio. Hebreos 10:12

No hay NADA que tu puedas hacer que te de perdón de pecados. Cristo pagó la deuda a través de su muerte y resucitó como prueba de su victoria. El quiere que tu recibas este perdón, pero necesitas creer por fe en su sacrificio salvador. No es algo mental sino algo de tu voluntad y tu corazón. Si no lo has hecho, te invito esta mañana a que lo hagas.

2. La Resurrección Muestra que Cristo es Poderoso para Vencer el Pecado, la Muerte, el Diablo y la Condenación Eterna. Heb. 2:14-15, 17

A. Nuestro Señor Participó de la Muerte para Vencer al Diablo – Hebreos 2:14

La muerte viene como herencia del pecado original además de la práctica en nuestra vida. (Rom. 6:23) Satanás fue el iniciador de esto y ha llegó a tener el “imperio” de la muerte. Cristo a través de su muerte y resurrección venció a la muerte y al Diablo mismo. Satanás está derrotado. La muerte eterna ya no triunfa, sino que Cristo la venció al resucitar y ofrece la vida eterna en vez de la muerte eterna a todos los que creen en su nombre.

Satanás no quiere que sepas esto. No quiere que nadie sepa esto. El sigue actuando como si tiene el poder de la muerte. El quiere que vivas tratando de ganarte la entrada al Reino de Dios y así seas condenado por tus obras.

B. Nuestro Señor Participó de la Muerte para Librarnos de la  Esclavitud del Pecado y la Sentencia de la Condenación Eterna – Hebreos 2:15
“y librar a todos los que por el temor de la muerte estaban durante toda la vida sujetos a servidumbre.”

Nuestro Señor, el Hijo de Dios, tuvo que humanarse para poder rescatarnos. Pero no solo se humanó sino que se ofreció para morir por nosotros que estábamos atados a la muerte, esclavizados el pecado y sentenciados a la condenación eterna. Nuestro Señor dijo que si Él, el hijo, nos  libertara, seríamos verdaderamente libres. Solo Él puede hacerlo porque solo Él venció la muerte.

Si tu no has dado tu has aceptado a Cristo, estás todavía bajo el dominio de la muerte y el diablo mismo. Estás todavía en servidumbre al pecado. Solo el Cristo resucitado puede librarte, pero debes venir a Él hoy. ¿Porqué esperar más? ¿Porqué arriesgar más?

Quiero esta mañana que escuches un testimonio de como Cristo libró a Maribel de sus pecados y la condenación eterna.

Esto es lo que nuestro Señor resucitado hace. Rescata del pecado. Libra de las garras de Satanás, perdona todos los pecados y da la vida eterna. Esto fue su diseño.

3. La Resurrección Declara que el Plan de Dios se Ha Cumplido – Juan 6:37-40

A. Nuestro Señor Vino a Cumplir la Voluntad de Dios – Juan 6:37-39

“Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.
38 Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
39 Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.”

Dios Hijo vino para cumplir la voluntad de Dios, el plan de Dios. El plan de Dios es que el Hijo viniera a salvar lo que se había perdido. En Juan 6:51 dice que el vino para dar su vida “por la vida del mundo”. Esto lo haría muriendo en la cruz y resucitando al tercer día. Él vino a rescatar a Maribel que estaba perdida en su pecado. El vino a rescatarnos. Este fue su plan.

B. Nuestro Señor Vino a Dar Vida Eterna y Promesa de Resurrección – Juan 6:40

“Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquél que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.”

Nuestro Señor a través de su muerte y resurrección nos da la vida eterna. Esto fue lo que el prometió. (Juan 5:24) a los que creen en su nombre. No solo ofrece vida eterna sino también ser resucitado en el día postrero. Quiere decir que recibiremos un cuerpo inmortal cuando entremos en su Reino.

Esto no es algo que comienza después de la muerte. Comienza en el momento que crees en Él como tu Salvador y Señor. Puede comenzar para ti ene esta mañana.

4. La Resurrección Afirma que Nuestra Fe es Real – 1 Cor. 15:14

La resurrección de Cristo afirma que nuestra fe es real. Nuestra fe está basada en una verdad empírica e histórica, no un cuento. Si Cristo murió, pero no resucitó no nos puede librar de la muerte eterna del pecado. Esto quiere decir que estamos perdidos eternamente y no tenemos vida eterna. Nuestra fe sería vana. Pero sabemos que SI resucitó.  Siendo el Hijo Eterno de Dios, era imposible que la muerte lo retuviera. (Hechos 2:24) porque Él es la resurrección y la vida (Juan 11:25).

Nuestro Señor no solo ha pagado por nuestros pecados, ha vencido a la muerte, el pecado y al diablo y cumplido con el plan de Dios de salvación, sino que nuestra fe esta segura en varias maneras:

A. Nos ha Declarado Justos – Rom. 4:25

Esto quiere decir que Dios nos ha declarado “sin culpa” de nuestros pecados porque Cristo ya pagó esa deuda en nuestro lugar. Y por esto, flagelaciones o penitencias no son necesarias. Es más, son una ofensa a nuestro Señor ya que su sacrificio fue perfecto. Cuando alguien paga tu deuda y te dice que no le pagues ya estas a cuenta. Sin duda lo hace por gracia. Tu cuenta es saldada. No hay necesidad que le pagues. Tratar de pagarle es un insulto a su bondad y gracia.

Este estado es un estado permanente que no puede cambiar por esta validado eternamente por la sangre de Cristo y afirmado por la resurrección de Él de entre los muertos.

B. Tenemos Paz con Dios – Rom. 5:1, 10

“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo”

Antes de conocer a Cristo éramos enemigos de Dios debido a nuestro pecado que nos estorbaba en tener esa reconciliación con Él. Pero nuestro Señor al resucitar nos abrió el camino a Dios directamente. Él es nuestro sumo sacerdote, nuestro único intercesor que nos permite ser reconciliados con Él y tener comunión con Dios.

El es nuestra paz.

C. Tenemos Salvación Eterna – Rom. 5:10

“Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida.”

Debido a que hemos sido reconciliado con Dios ahora tenemos la vida eterna. Cuando creemos en Él nos da su vida. Su vida nos salva de la muerte eterna y nos da la salvación eterna.

D. Recibimos su Gracia para Vivir y Crecer – Rom. 5:2; 6:1

“por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes” Rom. 5:2

Quiero que escuches un segundo testimonio que muestra como nuestro Señor resucitado cambia las vidas, dando perdón de pecados y salvación eterna.

El mensaje de la resurrección es claro.  La resurrección prueba que nuestro Señor Jesucristo pago por nuestros pecados, es un hecho realizado, muestra que Cristo es venció  el pecado, la muerte, el diablo y la condenación eterna, cumplió el plan de Dios, y afirmó que nuestra fe es real, no una basada en fábulas. Has escuchado dos testimonios de como el Señor resucitado transforma al que cree en El. Ahora es tu momento para actuar, no con drama, penitencias, promesas sino creyendo en Él, arrepintiéndote de tus pecados, y dándole tu vida en este día.

 Facebook        Twitter        Instagram        Sitio Web   Youtube
Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo el cordero de Dios, Cristo Murió por nosotros, Cristo resucitó, el mensaje de la resurrección, la vida en Cristo, Resurrección | Leave a comment

Seder

En el libro del Éxodo (Ex. 12,1-14) se narra la institución del Séder (ordenación) en la fiesta de Pascua. Esta habla y enseña de la gracia redentora de Dios a través del cordero de Dios que quita el pecado del mundo.

Hebreos 9: 11-15 dice:
“Cuando Cristo vino como sumo sacerdote de las cosas buenas que ya están aquí, pasó por el tabernáculo mayor y más perfecto que no es hecho por el hombre, es decir, no es parte de esta creación. Él no entró por medio de la sangre de cabras y terneros; pero él entró en el Lugar Santísimo de una vez por todas por su propia sangre, habiendo obtenido la redención eterna. La sangre de las cabras y los toros y las cenizas de una novilla rociadas sobre aquellos que son ceremonialmente inmundos, los santifican para que estén exteriormente limpios. ¡Cuánto más, entonces, la sangre de Cristo, quien a través del Espíritu eterno se ofreció sin mancha a Dios, limpia nuestras conciencias de los actos que conducen a la muerte, para que podamos servir al Dios viviente! Por esta razón, Cristo es el mediador de un nuevo pacto, para que aquellos que son llamados puedan recibir la herencia eterna prometida, ahora que ha muerto como rescate para liberarlos de los pecados cometidos bajo el primer pacto.”

 Facebook        Twitter        Instagram        Sitio Web   Youtube
Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> Cristo el cordero de Dios, Cristo nuestra pascua, éxodo 12, Pascua, seder | Leave a comment

Aprendiendo del Pasado – Salmo 119:49-56 – Tercera Parte

En la entrada pasada hablamos tres verdades que debemos recordar que Dios ha hecho en el pasado. En esta entrada aprenderemos dos más.

4. El Nombre de Jehová Nos Lleva a Seguir su Enseñanza (ser obediente) v. 55

“Me acordé en la noche de tu nombre, oh Jehová,
Y guardé tu ley.”

Su nombre no quiere decir su nombre personal como nosotros lo usamos. En este caso está hablando de su nombre, su carácter, quien es Él tal como ha sido revelado en su Palabra nos lleva no solo a conocerle más sino a obedecer, “guardar” su ley.
Para el salmista sucede en la noche, en la oscuridad (en estos tiempos no había luz) que viene este reconocimiento de quien es Dios para él. Es algo que toma mucha fe. Es en la noche que nosotros tendemos quejarnos más o tener más ansiedad e inseguridad. Pero para el salmista la noche era para acordarse del nombre de Jehová y determinar ser obediente a Él.

Su Palabra nos dice quien es Él. En el pasado hemos estudiado los atributos de Dios. Es particularmente evidente el nombre de Dios en los Salmos. ¿Cómo es Dios en los Salmos?

Este nombre en el Nuevo Testamento se llama Señor Jesucristo. Filipenses 2:9-11 nos dice esto:

“Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,
para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.”

Mabel era una ancianita de ochenta y seis años que había vivido en un hospital para convalecientes por más de veinte y cinco años. Un pastor iba seguido a visitar este hospital a pesar de que no era un lugar favorito, donde si han visitado antes, el olor al orín es evidente, ancianitos en condiciones demacradas pasan sentados por horas. En este caso particular este pastor caminaba en un pasillo buscando a alguien a quien pudiera darle una flor. Allí encontró a Mabel que estaba en una silla de ruedas. Tenía una cara horrenda ya que el cáncer había carcomido parte de su cara. Esto hacia que constantemente votara saliva de su boca. Estaba ciega y no escuchaba con la ayuda de aparatos en el oído.  En este hospital, las nuevas enfermeras eran asignadas a ella porque eran pocos los que podían aguantar tal condición.
El pastor no sabe porque pero le habló y le dándole una flor le dijo, “Aquí está una flor para ti. Feliz día de las Madres.” Ella dijo, “Gracias, me encanta. Pero ¿puedo dársela a alguien? Como puedes ver estoy ciega.” “Claro” dijo el pastor y fueron a dársela a otro paciente, al cual le dijo Mabel, “Toma, es de parte de Jesús.”
Esto motivó a este pastor a formar una amistad con ella y a conocerle más. La iba a visitar una o dos veces por semana. Algunas veces le leía de la Biblia o cantaban himnos. Ella recitaba pasajes de la Escritura y de los himnos de memoria. El se daba cuenta que para ella todo esto no era solo un rito sino algo significante para ella. El nunca notaba que se quejaba de su soledad o dolor excepto a través del énfasis que hacía en las palabras de la Biblia o de los himnos.        
En una ocasión el pastor le preguntó, “¿Qué piensa Mabel hora tras hora, día tras día, semana tras semana sin saber que día o que fecha es hoy?” Ella dijo, “Pienso acerca de Jesús”. El le dijo, “¿Qué piensas acerca de Jesús?”
Ella respondió: “Pienso lo bueno que ha sido conmigo. El ha sido muy bueno conmigo. Soy una de esas personas satisfechas. A muchas personas no le interesa mucho lo que yo pienso. Muchas personas piensan que soy anticuada. Pero no me importa. Prefiero a Jesús. El es para mi el todo en este mundo.”
Luego de esto Mabel comenzó a cantar el himno,

“Jesús es todo el mundo para mi,
Mi vida, mi gozo, mi todo.
El es mi fuerza día a día.
Sin El caería.
Cuando estoy triste, voy a El.
Cuando nadie me puede alegra, voy a El.
Cuando estoy triste, El me hace feliz.
El es mi amigo.                            

Fuente”: https://michaelgrose.wordpress.com
citado del libro John Ortberg “The Life You Always Wanted”

Mabel no vivía en su pasado. Recordaba lo que su Señor había hecho por ella. Ella sabía lo que era acordarse en la noche del nombre del Señor. Conocía personalmente a su Señor que le había salvado y por esto guardaba su ley en su corazón aun en las circunstancias tan difíciles que se encontraba.

La quinta verdad que debemos recordar es que

5. La Palabra de Dios es su Recompensa v. 56

“Estas bendiciones tuve
Porque guardé tus mandamientos.”

Este último versículo es paralelo al versículo 50. Ambos comienzan con “esta”. Es la Palabra de Dios que le da consuelo en la aflicción y es ella su recompensa (bendiciones) porque ha sido obediente a los preceptos o mandamientos del Señor.

¡Que diferente es la actitud del salmista a la que vemos hoy en el cristianismo! Hay dos extremos que vemos hoy. Uno es el de buscar la recompensa como si fuera una competencia. Queremos ganarnos el premio mayor en el cielo. Trabajamos como si la salvación fuera por obras. Pero esto es equivocado bíblicamente. Es la motivación incorrecta.

La segunda postura que tomamos es la de apatía. Ya el Señor nos salvó y no necesitamos hacer nada, excepto “portarnos” bien, ir a la iglesia, asistir a actividades especiales, y dar “limosnas” para ayudar a Dios. Esto es también equivocado.

Para el salmista su recompensa era la Palabra de Dios. “Estas bendiciones” tuvo por medio de la obediencia a los mandamientos del Señor. ¿Porqué?
Porque la Palabra revela el nombre de Jehová y al ir obedeciéndola va conociendo más a Dios. Esto es la mejor recompensa. Esto será lo que haremos en la eternidad, le conoceremos. Sí, serviremos, reinaremos, pero el centro de todo es nuestro Señor con quien tendremos comunión toda la eternidad. Conocerle no terminará jamás.
Mientras estemos en este mundo, nuestro deseo debe ser conocerle a través de su Palabra y ser obediente a Él. Esta es nuestra mayor recompensa.

¿Cómo comenzar a documentar lo que Dios ha hecho en tu vida?

1. Dedícate a estudiar y memorizar la Palabra de Dios. Escribe lo que Él ha hecho. Te recomiendo una Biblia de Apuntes donde puedas ir anotando lo que Dios ha hecho y sigue haciendo y hará.

2. Un diario personal. Escribe lo que Dios te está enseñando y lo que quiere que hagas.

3. Si no eres dado a escribir, toma fotos de eventos, experiencias que te ayudan a recordar lo que Dios ha hecho en tu vida.

Debemos decir: “Verdaderamente, mi vida cuando la rendí a Cristo, llegó a ser de Él. Él tiene control de ella aunque muchas veces me hago creer que soy yo la gobierna. Mi vida le pertenece, por lo tanto mi historia es su historia. Soy parte de su historia y no lo opuesto. Así que todo lo que yo soy o seré está vinculado con quien es El.”

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> aprendiendo del pasado, La Palabra, La Palabra de Dios, salmo 119, Salmo 119:49-56; salmo 119, zayin | Leave a comment

Aprendiendo del Pasado – Salmo 119:49-56 – Segunda Parte

El salmista no solo le recuerda a Dios lo que ha hecho en el pasado sino también se recuerda a sí mismo lo que Dios ha hecho tanto alrededor de el como en su vida.

Recordándonos lo Que Dios Ha Hecho en le Pasado vv. 52-56

Hay verdades que se recuerda:

1. Dios Juzga la Maldad v. 52

“Me acordé, oh Jehová, de tus juicios antiguos,
Y me consolé.”

Dios siempre juzgará. La Escritura tiene ejemplos tras ejemplos de sus juicios. Nadie se puede escapar. Dios es MUY paciente porque quiere que los que no le siguen se arrepientan, pero no quiere decir que no los juzgará.

La última parte del Salmo 1 dice que Dios va a juzgar a los burladores, los que no quieres seguirle.

4 No así los malos,
Que son como el tamo que arrebata el viento.

5 Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio,
Ni los pecadores en la congregación de los justos.

6 Porque Jehová conoce el camino de los justos;
Mas la senda de los malos perecerá.

Porque Dios juzga la maldad debemos estar tranquilos. Podemos respirar profundamente y decir, “Todo esta en las manos de Dios.” No tenemos que tomar el rol de juez nosotros mismos.

La segunda verdad que debemos recordar es:

2. Los Malos Rechazan lo que Dios Manda v. 53

“Horror se apoderó de mí a causa de los inicuos
Que dejan tu ley.”

El hecho de que los malos, los que se deleitan en el mal debe llevarnos a sentirnos a un “enojo justo”. Esta es la idea del versículo.
Estas personas dejan la enseñanza de Dios. Esto pasa con personas que dicen ser cristianos. Esto sucede con nosotros los cristianos en ciertas ocasiones.

¿Reaccionamos de esta manera o simplemente lo tomamos como un hecho que aceptamos porque es parte de la vida o la cultura en que vivimos? Deberíamos ser tan sensibles a la desobediencia de otros que debería llevarnos a estar horrorizarnos. Hoy día parece que ya no nos horroriza nada de lo que es contrario a la verdad de Dios.

Pero nosotros, si somos esas personas que aprendemos del pasado debemos hacernos recordar que esto no debe ser nuestra característica.

3. La Verdad de Dios Nos Trae Alegría en nuestra Morada Temporal v. 54

“Cánticos fueron para mí tus estatutos
En la casa en donde fui extranjero.”

Esto es lo que debemos hacer con los “estatutos”, lo que Dios nos ha dado como sus normas. Deben de ser cánticos alegres. Es como el canto de la semana pasada que cantó Mechelle, “La Ley de Jehová”. La verdad de Dios debe traernos alegría ya que somos peregrinos en este mundo. Vamos de pasada.

Esto de ser peregrino es algo que en los últimos tiempos el Señor me ha estado enseñando. Quizás esto tenga que ver con nuestra edad pero creo que a medida que conocemos más al Señor a través de su Palabra nos damos cuenta lo transitorio que es nuestra estancia en este mundo.

Cuando era niño me gustaban las películas de Pedro Infante. Me gustaba porque tenían buenas historias y cantaba muy bien, pero a medida que las miraba me daba cuenta que siempre que tenía problemas especialmente con una mujer terminaba emborrachándose y cantando.

Ando Borracho

Ando mucho, pero mucho muy borracho
Por un amor que me trae mal herido
Ando mucho, pero mucho muy borracho
Y qué, y qué me importa si me envicio

Ay cuánto sufrimos los que mucho amamos
Primero reímos y después lloramos
Qué me importa si hoy por mi puro gusto
Yo río, pos muy mi risa Si lloro muy mi llanto
Y si al mundo no le gusta que vaya mucho al diablo (el llanto de el aquí…)

Qué me importa si hoy por mi puro gusto
Yo río, pos muy mi risa Si lloro muy mi llanto
Y si al mundo no le gusta que vaya mucho al diablo

Ando mucho, pero mucho muy borracho

Para el salmista los estatutos, la verdad de Dios eran sus cánticos no las canciones de Pedro Infante.

¿Te da alegría la verdad de Dios? ¿Te motiva a vivir una vida donde hay cantos, salmos o himnos espirituales que alaban a Dios o prefieres los cánticos del mundo que te desvían de la verdad de Dios?

Material is copyright by eigaldamez. Permission is given
to re-post or reproduce without editing the content.

Disclaimer:
The contents of all personal web pages and blogs published are solely my responsibility.
Statements made and opinions expressed on personal pages are strictly those of the author and not of any organization, church, or school.

<span class="entry-utility-prep entry-utility-prep-cat-links">Posted in</span> aprendiendo del pasado, salmo 119, Salmo 119:49-56; salmo 119, zayin | Leave a comment